Pero tal como está el mundo deberíamos leer mas la Biblia y menos los móviles. Deberíamos ser pausados en nuestro forma de pensar y mas razonados en nuestros actos. Deberiamos ser mas humildes y menos soberbios, deberiamos ser mas solidarios y menos egoistas, deberiamos ser mas templados y menos iracundos.
Deberíamos ser mas prudentes y menos arriesgados, deberíamos ser mas fuertes y menos débiles ante las tentaciones del poder, deberíamos ser mas justos con todos y no injustos con todos, a unos por que se les perdona, al ser de la misma cuerda, y a otros porque se les acosa infundadamente por estar en el otro lado del muro.
Es facil ser, o mejor deber ser. Hay algunas personas en esta sociedad dignas de merecer ser seguidas en todos sus actos, aunque pertenezcan a núcleos distintos en nuestra sociedad. Hay congregaciones religiosas que son verdadero ejemplo para cualquier ciudadano cualquiera que sea su credo o religión.
Pero antes de llegar a esa congregación veamos que hacemos o permitimos hacer a quienes hoy nos gobiernan. Vemos, asombrados, como dos personas, una de ellas lleva en el poder un montón de años y otro es un recién llegado, dicen que van a imponer la paz en el mundo. Lo primero Ucrania, las puertas de Europa. Esto para mi y lo otro para ti. Oiga pero de quien es lo que ustedes pretenden repartirse. Actúan estos dos elementos como si les importara nada. Ellos lo pueden todo. Son los amos del mundo. Pero, oigan ustedes, que esas tierras no son suyas. Que puede que los vecinos no estén de acuerdo con vuestra intervención. A ellos les da igual. A los vecinos de Ucrania no les teme nadie. Llevan años predicando el anti militarismo y el no a la guerra. El ejercito de los vecinos de Ucrania está en manos de extranjeros. Los locales tienen el sentido de la patria por los suelos. Llegan a quemar su propia bandera o incluso permiten que un locutor de televisión se suene los mocos con ella. Desarmados de patriotismo y vacíos de principios morales son presas fáciles para quien o quienes armados con un machete aparezcan en nombre de Ala cortando cabezas o matando a menores para después esperar a las fuerzas de seguridad en actitud sonriente para que lo detengan. Europa hoy es nada. Lo que no sabemos es quien la va a destruir después de haber puesto nosotros mismos los explosivos en nuestros pilares, pero está claro que Europa será engullida por cualquiera de las fuerzas que la amenazan el Islam o el capitalismo mas atroz que se conoce representado en estos momentos por Rusia, China o EEUU, aunque este ultimo sea menos probable que los otros tres.
Mientras, nuestros gobernantes acostumbrados a buen vivir no tienen ni idea de que hacer. En vez de unirse, que no saben, dos de ellos van a ver sin representación de los demás a quien a iniciado el aquelarre del orden mundial.
