La forma de actuar preferida de quien gobierna España. El arma preferida de quienes obedecen al gobierno. Obediencia absoluta. No hay mas. No hay un programa de sucesión en el PSOE. No se contempla la posibilidad de que a pesar de todo lo que nuestra democracia esta sufriendo exista la mínima posibilidad de revuelta democrática en el propio partido. No hay quien se mueva dentro del PSOE, que no sea fiel sanchista de facto.
Ha exprimido a sus socios de gobierno hasta la saciedad. Los ha usado para destruir España. Ninguno de sus socios quiere a España para nada, solo para exprimirla económicamente y vivir de su dinero haciéndose las victimas. Ha usado a esos socios, que parece le han empezado a dar la espalda, para destruir el carácter democrático de cualquier institución que se le oponga por ley y constitución.
Su objetivo es el poder absoluto. Aunque no pueda salir a la calle porque sencillamente el pueblo soberano no lo quiere.
Un poder absoluto que le concede nuestra propia democracia parlamentaria tal y como está constituido nuestro parlamento. !Que grandeza de democracia. Permite, incluso ese abuso!
El ataque que se avecina es brutal. Quizá nos enfrentemos a la ultima batalla en la que nuestra democracia pueda demostrar no solo su grandeza, sino también su fortaleza. Andalucía como granero de votos del PSOE será el próximo campo de batalla manipuladora. Ya lo dijo Pedro Sánchez en un mitin, en Benalmadena, en el que hizo que se levantara Magdalena Alvarez y refiriéndose a ella la describió como una política socialista que había sufrido el vil ataque de la derecha durante muchos años. Ese va a ser el guion del PSOE en Andalucía. De hecho Espadas ya ha empezado afirmando que Moreno Bonilla ha llegado al poder a través de la mayor cacería política de la democracia. Es la idea que va a trasmitir el sanchismo fundando sus argumentos en las resoluciones del Tribunal Constitucional.
Basándose en esos argumentos y en la tendencia que el sanchismo ha implantado de las tres extremas derechas que pretenderá identificar con las extremas derechas europeas. Aprovechara las alteraciones que se produzcan en Francia contra la manifestación en las urnas de la voluntad popular para criminalizar todo lo que no sea sanchismo. Tratara de hacer creer a los andaluces que es el salvador de Europa al poner un cordón político a todo lo que no sea su pensamiento único.
