Parece mentira pero no lo es. Ahora sí, los malagueños podremos ir al centro de la ciudad en metro. Han pasado 17 años desde que se puso la primera pica del metro en Carretera de Cádiz. 14 años desde aquel mes de febrero de 2009 en el que el metro de Málaga iba a tener operativo su trazado completo. Y también lejos queda aquel 11 del 11 de 2011 que, lamentablemente, ha pasado a la posteridad.
Hoy, ¡por fin!, inauguramos la llegada al centro del metro y a la que en unos años se unirá el trazado soterrado hasta el Hospital Civil, una reclamación ciudadana de los vecinos de mi distrito de Bailén-Miraflores a la que la anterior Junta de Andalucía socialista no hizo ningún caso.
Tuvo que ser Juanma Moreno al llegar a la Presidencia del Gobierno de Andalucía quien fijara como meta principal no sólo desbloquear unas obras que llevaban paradas años en el entorno del Corte Inglés y que tenían el freno echado por la desidia del PSOE sino que el metro fuera bajo tierra al Hospital Civil, donde se ubicará el futuro tercer hospital, también impulsado por Moreno.
La llegada del metro se alinea con la necesidad de seguir avanzando en movilidad sostenible para una ciudad más amable. En carriles bici seguimos trabajando pese a los palos en las ruedas que puso el anterior Gobierno de PSOE e IU en la Junta de Andalucía, los adalides de la movilidad sostenible que pese a haber firmado con el Ayuntamiento el Plan Andaluz de la Bicicleta ejecutaron cero kilómetros.
A día de hoy el Ayuntamiento tiene en marcha varios trazados nuevos, como el carril bici desde el centro al Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso, además de proyectos que se licitarán en breve y que sumarán 8,8 kilómetros más, lo que supondrá alcanzar los 49,1 kilómetros de carriles bici en Málaga.
A esa movilidad sostenible se suma el Plan Litoral, un ambicioso proyecto de transformación de Málaga que permitirá disponer de 70.000 metros cuadrados de uso peatonal y que potenciará el uso del transporte público metropolitano, generará carriles bici, menos ruido y menos contaminación.
Un proyecto de gran envergadura que necesita la alianza y el compromiso de todas las administraciones. Málaga tiene que continuar trabajando en su futuro para seguir construyendo una ciudad mejor si cabe.
Nuestra ciudad, pese a lo conseguido por el esfuerzo municipal, tiene por delante una etapa ilusionante gracias, ahora sí, a la complicidad de la Junta de Andalucía, que contrasta con el oscurantismo al que nos tenía, y nos tiene, acostumbrados el PSOE, con tramas de corrupción que siguen saliendo a la luz, como los casos ‘Mediador’ o ‘Cuarteles’, o el último episodio que salpica a la socialista malagueña María Gámez después de la imputación judicial de su marido en una pieza separada de los ERE, forzando su dimisión al frente de la Guardia Civil.
Aprovechemos este nuevo tiempo de lealtad en el que la Junta y el Ayuntamiento de Málaga avanzan juntos por el camino del progreso. El metro alcanza por fin la meta tantos años deseada y nuestra ciudad sigue impulsando su segunda gran transformación.
