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Ideas, pensadores y sillones

Ya tenemos el deficitario sistema de pensiones, arreglado. El Sr. Sánchez va a subir los impuestos a los bancos. Ya está. Es una medida económica, pues servirá para recaudar dinero, pero sobre todo social, pues se demuestra a la izquierda radical que si se puede ir contra el capital. De esta manera se podrían incluso arañar votos a Podemos y a Izquierda Unida. Una vez más pura demagogia.

¿Se sabe cuántos créditos ha condonado la banca a los partidos políticos? ¿Han hecho ustedes números de cuanto se ahorraría el Estado si en vez de pagar a los políticos los sueldos, dietas y pensiones vitalicias actuales, se pagaran los sueldos, dietas y pensiones normales, que todo ciudadano cobra tras años de trabajo? ¿Se han planteado ustedes disminuir el número de políticos por comunidades autónomas? ¿Han pensado ustedes en trabajar más, pensando en el bienestar de los ciudadanos, y no solo en sus sueldos y pensiones?¿Han pensado ustedes que el ciudadano estaría más tranquilo sabiendo que carecen de influencia sobre los jueces?

Pues parece que no. Que en nada de lo propuesto han pensado nuestros políticos, pues ahora llega el Sr. Iglesias y concluye que para solventar los problemas de España lo que hay que hacer es echar al Partido Popular de España, y abolir la Monarquía. Es cuestión de impresionar. Cualquier cosa para demostrar que la izquierda, izquierda de verdad "soy yo". Con estos pilares para un gobierno, España está arreglada. Se desarreglaría todo. Caminaríamos hacia una dictadura de derechas o de izquierdas.

Una y otra tienen dos cosas en común: las libertades desaparecen y el capital queda en manos de unos cuantos que son los únicos que gobiernan. Propongo a partir de ahora, que nosotros los demócratas, es decir quienes tenemos capacidad de convivir en paz sin necesidad de echar ni excluir a nadie de España, hablemos de dictaduras capitalistas. Este término representan con más realidad la tendencia de una izquierda española que pretende resurgir a costa del capital y blandiendo la bandera con la hoz y el martillo.

Pero en el fondo fíjense ustedes que la cuestión de nuestros políticos no es mejorar el bien común, sino el bien personal. La ideología no importa. Lo importante para ellos es su bienestar material cualquiera que sea el sillón que ocupen o grupo al que pertenezcan. Lo importante es entrar en la tribu política.

Si no fuese de esa manera nuestro sistema educativo sería bueno, nuestros medios de comunicación emitirían programas formativos, y no deformadores como en la actualidad, y la mujer ocuparía en nuestra sociedad el lugar que le corresponde, no considerando el 27% de nuestra juventud que la violencia de género es algo normal.

Poco hablan nuestros políticos de familia, esfuerzo, educación. Ellos a fin de cuentas en un porcentaje elevado no tienen familia, ocupan un cargo político por lo que no ha realizado esfuerzo laboral alguno y finalmente son productos de un sistema educativo roto en toda su estructura.

Tiempo que recorrer le que a este país en el que cualquier cosa es más respetada que la propia legalidad y en el que la libertad se mal ejerce como libertinaje.

Solo con un cambio masivo en el voto de los que decidimos pueden los vividores de la política darse cuenta de que su tiempo ha pasado. El voto es lo único que hace que el político se preocupe. Toquemosle la gaita a ellos, en vez que nos la toquen a nosotros.

 

[cabezon name="Fernando Guerrero" designation="Ensayista" img="guerrero" /]

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