Dos de los tres implicados ya se encuentran en prisión
Agentes de la Policía Nacional detuvieron en la provincia de Jaén a tres hombres con edades comprendidas entre los 20 y 36 años, por su presunta responsabilidad en el asalto a una pareja cuando llegaban a su vivienda en Torremolinos, robo que tuvo lugar el pasado día 14 de mayo. Según las pesquisas, los ladrones asaltaron a las víctimas cuando llegaban a su casa al término de la media noche.
Los asaltantes, encapuchados y armados con cuchillos les aguardaban en el interior del ascensor, tras amenazarles, agredirles e intimidarles, les obligaron a subir al domicilio donde les llegaron a atar y amordazar para robarles. Antes de huir, se hicieron con un botín de 2.500 euros en efectivo, varios teléfonos móviles, un reloj de gama alta y joyas, entre otros efectos.
Inicio de la investigación
La Sala del 091 comisionó a una dotación policial para que se dirigiera a una céntrica vía torremolinense donde, al parecer, había un hombre y una mujer que pedían auxilio a la vez que solicitaban la presencia policial. Ya en el punto, los agentes localizaron a las dos personas; el hombre, además, presentaba una herida sangrante en la mano izquierda. Inmediatamente la Policía Nacional avisó a los servicios médicos que se personaron en el lugar atendiendo a ambos afectados. Las víctimas relataron a los agentes que sufrieron un robo violento por parte de tres individuos, iniciándose entonces una investigación.
Tras las diferentes pesquisas, los investigadores identificaron a los presuntos autores, tres hombres vecinos de la provincia de Jaén. La fase operativa de esta investigación, en la que hasta el momento fueron tres personas y otra más investigada no detenida, se llevaron a cabo con la práctica de cuatro registros domiciliarios, tres en Bailén y uno en Linares, en los que se intervinieron, entre otros efectos vinculados con los hechos investigados, dinero, un reloj de gama alta, distintos cuchillos y varios teléfonos móviles.
De las investigaciones se desprendieron que "los atacantes lo tenían todo planeado, teniendo conocimiento de que las víctimas, que regentan un negocio en una localidad próxima, no se encontraban en su domicilio" explicaron desde la Policía Nacional.
De esa manera, se colaron en el edificio y esperaron dentro del ascensor a que llegaran. Allí, los asaltantes encapuchados y armados con cuchillos aguardaron a que regresaran de su trabajo, cosa que hicieron pasada la media noche. A partir de ese momento, tras el asalto inicial, comenzaron a amenazarles, e intimidándoles y agrediéndoles; a una de las víctimas le causaron un corte de unos 20 cm en el brazo por la que necesitó asistencia y tratamiento médico.
Finalmente les obligaron a subir al domicilio. Donde, tras amordazarles y maniatarles, se hicieron con un botín compuesto, entre otros efectos, por dinero, joyas y varios teléfonos móviles.
