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La dictadura avanza

Poco a poco. Aprovechando la situación social provocada por el covid, sibilinamente, en el aspecto legal, torticeramente. "La ley sola, no es suficiente" dijo Sánchez. Ojo, que esta expresión sale de la boca del presidente tras una entrevista con Torras y con ella pretende significar que las consecuencias judiciales provocadas por los actos ilegales e ilícitos del proceso de independencia catalán no deben ser judicializadas, sino que tenían que entenderse desde un punto de vista político.

La intención es manifiesta, la política por en cima de la ley y eso es sencillamente una dictadura.

Primero fue la Fiscalía General del Estado donde se produce una situación insólita al nombrar Fiscal General del Estado a una persona que ideológicamente está perfectamente definida al haber sido diputada del psoe, y ministra de justicia con el psoe.

Hasta tal extremo se identifica con la ideología del gobierno que la Fiscal General del Estado se abstiene de conocer el contenido de las querellas presentadas contra el Estado por su gestión de la pandemia.

Ahora le toca el turno al Consejo General del Poder Judicial.

La independencia del Poder Judicial es uno de los principios fundamentales que debe perseguir toda democracia, y estoy convencido de que esta afirmación es compartida por la mayoría de los españoles, con excepción de aquellos grupos que lo que pretenden en nuestra democracia es establecer una dictadura.
El vicepresidente segundo de este gobierno lo ha dicho:"Que no piense la oposición que va a volver a gobernar".

El gobierno trata de controlar la justicia: desde abajo y desde la cúpula.

Hoy la independencia del Poder Judicial peligra. Este gobierno no quiere obstáculos en su camino. Quiere politizarlo todo. Y quien politiza todo, destruye todo.

Antes de final de año este gobierno pretende aprobar una ley que le permita la modificación del Consejo General del Poder Judicial con mayoría simple, no como hasta ahora que hace falta una mayoría cualificada de los tres quintos de las Cámaras del Congreso y del Senado para su nombramiento.
Para este gobierno el consenso no existe. Quiere solo la imposición.

El control de la justicia permite a las dictaduras estigmatizar, perseguir y condenar a quienes no piensen como ellos, y no me refiero solo a la bancada del Congreso, sino también a los ciudadanos de a pie.

Una pena que España esté en manos de aspirantes a dictadores y que la ciudadanía piense que es lo único que nos puede pasar.

Curiosa la situación de nuestro país en el que políticos provenientes del régimen franquista son capaces de hacer una transición hacia la democracia ejemplar y aplaudida en países demócratas, y que tras cuarenta de años de democracia existan políticos en nuestro país que quieran llevar a nuestra sociedad a una nueva dictadura, en este caso social comunista.

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