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No sé que más se puede esperar

El noventa y cinco por ciento (95%) de los examinados de selectividad de una comunidad autónoma, aprobados. Que liquidez la de los examinantes, que pena para los examinados y que preocupación para la ciudadanía que se tenga que poner en manos de los profesionales que salgan de ese coladero.

Una muestra de lo que nuestro país se ha convertido. Un coladero social como reflejo de un coladero político. Todo es estadística y sobre ella se establece la ficción de nuestra sociedad. Un ejemplo aceptable para el momento que vivimos es predicar que si una familia se ha comido diez pollos en un mes y la de cualquier barrio marginal de nuestra sociedad no se ha comido ninguno nuestros actuales políticos publicarían que cada una de las familias se han comido cinco cada una y que por lo tanto la necesidad de la que hablan los enemigos del gobierno es completamente ficticia.

Imagen, ilusiones, humo y palabrería. Todo ello para contentar a quienes le mantienen en el poder. Cada paso para contentarlos es un acercamiento al vacio de la ruptura de España. Ya sé que España no les importa y que son capaces de admitir cualquier arbitrariedad con tal de no disgustar a quienes son sus socios. Quieren ser los usuarios del poder dándoles igual cuanto hayan perdido de España.

El noventa y cinco por ciento de aprobados. Fiel reflejo del coladero existente en nuestro país no solo en la enseñanza, base de toda sociedad, sino también en la gestión y administración de los intereses de los ciudadanos.

Como buenos aspirantes a dictadores han llegado a crear un enemigo: Marruecos. Había que empeorar la situación exterior para distraer los problemas interiores. Estamos en el momento del indulto. No de los indultos, sino del indulto. Otro coladero, pero esta vez del cien por cien. La ilegalidad es palpable. Da igual. Hay que colarse por las leyes, que si no, se pierde el poder. Lo importante es no perder el poder. ¿A dónde irían? Tienen que seguir saltándose cuantas leyes hagan falta para seguir en el poder. ¿Hay algún marco legal donde no haya tenido este gobierno un coladero? Y los ciudadanos que hacemos.

Donde está la indignación popular contra la subida de la luz. Ha coincidido con el enfrentamiento con Marruecos. Nos han distraído. No hace muchos días, hablo de meses, se manifestaban ante uno de los suministradores de electricidad insultándoles y amenazándoles. Hoy al causante de la subida de la luz, nadie le ha dicho nada. Nadie recuerda que antes de entrar al gobierno dijeron que no subiría el suministro eléctrico. Otro coladero. El de las mentiras de este gobierno que llego al poder mintiendo, y se mantiene mintiendo.

Lo dicho, no sé que más se puede esperar de este gobierno, aunque después de la subida de la luz nos demos cuenta que todo empezara a verse mas oscuro.

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